MPLS (Conmutación de etiquetas multiprotocolo) es un protocolo utilizado en telecomunicaciones y redes informáticas para acelerar y dar forma a los flujos de tráfico de la red. Su función principal es dirigir paquetes de datos a lo largo de rutas predeterminadas a través de la red. MPLS opera en la Capa 2.5, entre la Capa 2 tradicional (Enlace de datos) y la Capa 3 (Red) del modelo OSI. Este posicionamiento permite a MPLS enrutar paquetes de manera eficiente basándose en etiquetas simples adjuntas a cada paquete, en lugar de información de encabezado compleja, lo que lo hace más rápido y eficiente que el enrutamiento IP tradicional.
Uno de los principales beneficios de MPLS es su capacidad para mejorar el rendimiento y la eficiencia de la red. Al utilizar etiquetas para enrutar paquetes a lo largo de rutas predeterminadas o «rutas conmutadas por etiquetas» (LSP), MPLS reduce el tiempo y los recursos necesarios para que los enrutadores procesen y reenvíen paquetes de datos. Este mecanismo de conmutación de etiquetas permite a las redes MPLS lograr velocidades de reenvío de paquetes más rápidas, menor latencia y mejor gestión del tráfico en comparación con los métodos de enrutamiento IP convencionales.
MPLS es ventajoso porque admite calidad de servicio (QoS) y capacidades de ingeniería de tráfico. Permite a los operadores de red priorizar ciertos tipos de tráfico (como voz o video) sobre otros, asegurando un rendimiento consistente y un retraso mínimo para aplicaciones críticas. MPLS también facilita la utilización eficiente de los recursos de la red al permitir a los administradores ajustar dinámicamente las rutas del tráfico y asignar ancho de banda en función de las condiciones de la red en tiempo real y los requisitos de las aplicaciones. Estas características hacen que MPLS sea adecuado para admitir diversas aplicaciones y acuerdos de nivel de servicio (SLA) en redes empresariales, entornos de proveedores de servicios e infraestructuras de computación en la nube.
MPLS es más rápido que el enrutamiento IP tradicional debido principalmente al uso de etiquetas de longitud fija y rutas de reenvío predeterminadas. En las redes MPLS, los enrutadores toman decisiones de reenvío basándose en etiquetas adjuntas a los paquetes en el punto de ingreso a la red. Este método de conmutación basado en etiquetas elimina la necesidad de que los enrutadores realicen búsquedas complejas de encabezados y cálculos de ruta para cada paquete, lo que reduce la sobrecarga de procesamiento y la latencia de reenvío de paquetes. Como resultado, las redes MPLS pueden alcanzar velocidades de transmisión de datos más rápidas y una menor latencia en comparación con el enrutamiento IP, lo que las hace ideales para aplicaciones que requieren entrega de datos en tiempo real y de alto rendimiento, como conferencias de voz y video, juegos en línea y transmisión multimedia.