La configuración de WLAN implica configurar una red inalámbrica para permitir que los dispositivos se conecten y se comuniquen. Por lo general, esto requiere configurar un enrutador o punto de acceso inalámbrico, configurar sus ajustes, como el nombre de la red (SSID), los protocolos de seguridad (por ejemplo, WPA2 o WPA3) y asegurarse de que el dispositivo esté ubicado de manera óptima para cubrir el área deseada. Una vez configurada la red, los dispositivos se pueden conectar seleccionando la red de la lista de opciones disponibles e ingresando la contraseña o clave de seguridad requerida.
¿Cómo se activa la WLAN?
Para activar WLAN, debe habilitar la función de red inalámbrica en su dispositivo. En la mayoría de los dispositivos, esto se puede hacer accediendo a la configuración de red o al panel de control. Para las computadoras, puede hacer clic en el ícono de red en la bandeja del sistema o en la barra de tareas y seleccionar la opción para activar la conexión inalámbrica. En los dispositivos móviles, normalmente iría al menú de configuración, buscaría la sección de red o conectividad y cambiaría el interruptor de WLAN a la posición «encendido». Asegurarse de que el enrutador inalámbrico o punto de acceso también esté encendido y funcionando es esencial para establecer una conexión.
La diferencia entre WLAN y WiFi es que WLAN se refiere al concepto más amplio de redes de área local inalámbricas, que incluye cualquier red que utilice comunicación inalámbrica dentro de un área limitada. WiFi, por otro lado, es una tecnología específica y un término registrado que describe las WLAN basadas en los estándares IEEE 802.11. Básicamente, WiFi es un tipo de WLAN que sigue protocolos y estándares específicos para la comunicación inalámbrica.
Una conexión WLAN es un tipo de red que permite la comunicación inalámbrica entre dispositivos dentro de un área específica, como un hogar, una oficina o un espacio público. Utiliza ondas de radio para transmitir datos entre un punto de acceso central o enrutador y los dispositivos conectados, eliminando la necesidad de cables físicos y permitiendo una mayor movilidad y flexibilidad en el acceso a la red.
Una WLAN (red de área local inalámbrica) proporciona conectividad inalámbrica dentro de un área definida, lo que permite que dispositivos como computadoras, teléfonos inteligentes y tabletas se comuniquen y compartan recursos sin necesidad de conexiones por cable. Facilita el acceso fácil y flexible a servicios de red, Internet y recursos compartidos dentro del área de cobertura del punto de acceso inalámbrico o enrutador.