El valor RSSI (Indicador de intensidad de la señal recibida) cuantifica el nivel de potencia de una señal recibida, medido en dBm (decibelios milivatios). Se utiliza para evaluar la intensidad de la señal que recibe un dispositivo de una fuente de red, como una estación base o un punto de acceso. El valor RSSI ayuda a determinar la calidad de la conexión y el rendimiento potencial de la red.
¿Qué valor RSSI indica una señal fuerte?
Un valor RSSI que indica una señal fuerte suele estar entre -30 dBm y -50 dBm. Los valores más cercanos a -30 dBm representan una intensidad de señal excelente, mientras que aquellos más cercanos a -50 dBm siguen indicando una señal fuerte pero con una atenuación ligeramente mayor. Las señales dentro de este rango generalmente brindan una conectividad confiable y de alta calidad.
Para interpretar el valor RSSI, considere que los valores más altos (menos negativos) representan señales más fuertes, mientras que los valores más bajos (más negativos) indican señales más débiles. Por ejemplo, un valor RSSI de -40 dBm significa una señal fuerte, mientras que -80 dBm indica una señal más débil. Una buena intensidad de la señal garantiza una mejor conectividad, velocidades de datos más rápidas y un mejor rendimiento de la red.
El RSSI mínimo habilitado es el nivel de intensidad de señal más bajo que un dispositivo o red aceptará para mantener una conexión. Este umbral varía según la tecnología y la configuración de la red, pero suele establecerse entre -80 dBm y -90 dBm para muchos sistemas. Los valores por debajo de este mínimo pueden provocar problemas de conectividad o caídas de conexiones.
Generalmente se considera que una buena intensidad de señal está en el rango de -30 dBm a -70 dBm. Dentro de este rango, la conectividad suele ser sólida y el rendimiento de la red óptimo. Las intensidades de la señal fuera de este rango pueden provocar un rendimiento reducido, una mayor latencia o problemas de conectividad.
