Los cuatro tipos de computación en la nube son infraestructura como servicio (IaaS), plataforma como servicio (PaaS), software como servicio (SaaS) y función como servicio (FaaS). Estas categorías definen diferentes niveles de abstracción y servicios ofrecidos por los proveedores de la nube, que van desde infraestructura básica y sistemas operativos hasta aplicaciones totalmente administradas y entornos informáticos sin servidor.
Los cuatro tipos de nube hacen referencia a diferentes modelos de implementación: nube pública, nube privada, nube híbrida y nube comunitaria. Los servicios de nube pública son proporcionados por proveedores externos a través de la Internet pública y son accesibles para cualquiera que quiera utilizarlos. Los servicios de nube privada se operan únicamente para una única organización, lo que proporciona más control sobre los recursos y la seguridad. La nube híbrida combina modelos de nube pública y privada, lo que permite compartir datos y aplicaciones entre ellos. La nube comunitaria sirve a múltiples organizaciones con intereses similares y comparte infraestructura entre ellas.
«4 computación en la nube» no tiene una definición estándar en el contexto proporcionado. Puede referirse a un error tipográfico o a una falta de comunicación, ya que la terminología estándar implica categorías o tipos en lugar de una designación numérica.
Los cuatro componentes de un sistema de computación en la nube suelen incluir: clientes, que son los dispositivos del usuario final que acceden a los servicios de la nube a través de Internet; aplicaciones o servicios alojados en la nube, como ofertas SaaS; centros de datos o infraestructura de servidores que proporcionan recursos informáticos y almacenamiento; y la red que conecta todos estos componentes, permitiendo la transmisión de datos y el acceso a servicios en la nube. Estos componentes trabajan juntos para ofrecer recursos informáticos escalables y bajo demanda a través de Internet.