Naturalmente, la primera aplicación para la que se desarrolló e implementó una alternativa inalámbrica fue la telefonía de voz. Estos sistemas, llamados bucle local inalámbrico (WLL),
tuvieron bastante éxito en países en desarrollo como China, India, Indonesia, Brasil,
y Rusia, cuya alta demanda de servicios telefónicos básicos no pudo ser atendida
utilizando la infraestructura existente. De hecho, los sistemas WLL basados en tecnología digital mejorada
Estándares de telefonía inalámbrica (DECT) y acceso múltiple por división de código (CDMA).
seguirán desplegándose en estos mercados.
Al mismo tiempo, varias pequeñas empresas de nueva creación se centraron únicamente en proporcionar
Servicios de acceso a Internet mediante conexión inalámbrica. Estos proveedores de servicios de Internet inalámbricos
(WISP) normalmente implementaban sistemas en las bandas exentas de licencia de 900MHz y
Bandas de 2,4 GHz. La mayoría de estos sistemas requerían la instalación de antenas en el
instalaciones del cliente, ya sea en tejados o bajo los aleros de sus edificios.
Los despliegues se limitaron principalmente a barrios seleccionados y pueblos pequeños. Estos
Los primeros sistemas normalmente ofrecían velocidades de hasta unos pocos cientos de kilobits por segundo. Más tarde
Las evoluciones de los sistemas exentos de licencia pudieron proporcionar velocidades más altas.